Encontrar con espinacas recetas fáciles no es posible siempre sin salirnos de las más clásicas: espinacas con garbanzos, crema de espinacas, espinacas rehogadas con ajo… Las espinacas son fuente de vitamina y minerales, muy versátiles en la cocina y si conseguimos que los peques de la casa las tomen, habremos dado un gran paso en su alimentación. ¿Queréis saber cómo lograrlo? Ponerlas dentro de algunas de sus recetas favoritas es la mejor forma de lograr que poco a poco se vayan acostumbrando a su sabor.
Para lograr este objetivo y para que todos disfrutéis de recetas fáciles con espinacas, hoy os dejamos dos que seguro os encantarán.
Tortellini con espinacas y tomate frito Starlux
La pasta es uno de los platos favoritos de los niños. Su sabor les encanta y combinado con tomate frito Starlux el éxito está asegurado. ¿Apuntamos los ingredientes? Son fáciles de encontrar en los supermercados, así que con poca antelación podéis ir a comprarlos.
Necesitamos: 300 gramos de tortellini, 150 gramos de espinacas frescas, aceite de oliva, 2 dientes de ajo y nuestro rico tomate frito Starlux.
Su preparación es muy sencilla, partimos las espinacas y las ponemos en una olla con aceite de oliva y los ajos rehogados. Dejamos un minutos aproximadamente y agregamos el tomate frito y la pasta ya cocida. Dejamos todo junto al fuego durante otro minuto más y listos para tomar.
Croquetas de espinacas
Otra de nuestras propuestas con espinacas es una receta fácil de croquetas. Es un plato sencillo que podremos hacer elaborando nosotros la bechamel o utilizando una ya envasada.
Los ingredientes que vamos a necesitar son: 1 bote de espinacas, aceite de oliva Virgen Extra, 2 dientes de ajo, harina, 600 mililitros de leche, 1 cucharada de comino, sal, 2 huevos cocidos, pan rallado y huevo batido. ¿Listo sobre la mesa? ¡Vamos a cocinar!
Escurrimos el bote de espinacas. En una olla ponemos 5 cucharadas de aceite de oliva Virgen Extra y añadimos 2 dientes de ajo bien picados. Cuando empiecen a dorarse añadimos 4 cucharadas de harina y cocinamos 1 minuto para quitarle el sabor a crudo de la harina. Entonces añadimos la leche y mezclamos con unas varillas. Dejamos hasta que la bechamel espese y añadimos una cucharada de comino molido, sal y las espinacas.
Mezclamos y ponemos la masa en una fuente. Añadimos los dos huevos cocidos bien picados, mezclamos y tapamos con un film de plástico. Introducimos en la nevera para que se enfríe. Sacamos y le vamos dando forma de croquetas, las pasamos por harina, después por huevo batido y, por último, por pan rallado. Las freímos en abundante aceite de oliva y listas para comer. Os recomendamos poner un cuenco con tomate frito para que los más peques que aún no están acostumbrado al sabor de las espinacas puedan mojar.
